Monthly Archives: septiembre 2015

Profesionales cualificados, clientes contentos

Los casos de mala praxis por parte de algunos profesionales del sector se han multiplicado y han abierto una gran brecha con los clientes. Productos de riesgo que no se explicaban bien, hipotecas que no adaptaban al perfil del contratante…

Didier Weemaels © Creative Commons

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Todo esto nos tiene que servir de enseñanza para corregir conductas y formas de actuación. Pero debemos empezar por el principio. Los profesionales del sector tienen que entender al detalle de los productos financieros, para poder trasladar así a sus clientes la conveniencia o no de contratar un producto determinado y cuáles son las alternativas de inversión, siempre dependiendo de su perfil e intereses.

Debemos actuar con rapidez para recuperar el terreno perdido y la confianza con el cliente. El mundo financiero ya está tratando de aportar soluciones distintas e incluso utilizando herramientas tecnológicas que el profesional debe ir incorporando para poder desarrollar su trabajo de la forma más adecuada. En el caso de España, el sector financiero está sentando unas bases fundamentales para que no se repitan los episodios del pasado. Esa transformación en el sector es evidente y, aprovechando que la recuperación económica ya ha comenzado su curso, los profesionales tenemos por delante una ardua labor en la que debemos marcar como prioridad absoluta recuperar esa confianza perdida del cliente.

Existe un grave problema reputacional que los profesionales del sector debemos corregir. Pero además de la cualificación y actualización de los conocimientos, que debe ser parte diario del trabajo y que se le debe exigir a cualquier profesional que se siente delante de un cliente para ofrecerle asesoramiento, resulta fundamental atender una serie de criterios éticos, que ya exigen las certificaciones profesionales más prestigiosas a nivel internacional. La norma europea actual, y sobre todo la que viene, insiste en que los distribuidores financieros y los de seguros deben cumplir unos estándares de cualificación profesional.

Aaron Burden © Creative Commons

Aaron Burden © Creative Commons

La educación financiera es el otro gran reto al que se enfrenta el sector. Debemos mostrar empeño en promover la cultura financiera, tanto de los propios profesionales como de los clientes particulares. De momento, ya hemos detectado el problema y se lo hemos planteado a la Administración. Ahora solo falta que se concreten los planes de fomento de la cultura financiera. Nos jugamos mucho.

La gestión en el ahorro

Desde que nacemos, recibimos una constante educación basada en aspectos cívicos y éticos, necesarios para desenvolvernos en la sociedad en la que vivimos. Asimismo, obtenemos formación académica con el fin de convertirnos en grandes profesionales y entrar a formar parte del mundo laboral, tan necesario para ganarnos el pan.

korneker © Creative Commons

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Si nos paramos a pensar, es cierto que una etapa de nuestra vida la dedicamos a formarnos para acceder al mercado laboral, sin embargo, una vez en él, nos damos cuenta de que no disponemos de una “educación financiera” que nos permita optimizar nuestras ganancias y sacarle el mayor rendimiento posible, intentando evitar el despilfarro o la mala gestión del salario que cada vez nos cuesta más sacrificio conseguir.

La formación financiera es una cuestión fundamental, puesta que va ligada a la buena gestión y administración del patrimonio que vamos creando a través del trabajo que desempeñamos con tanto esfuerzo y dedicación.

Por desgracia o fortuna, tal y como está concebido el sistema que nos ha tocado vivir, el dinero forma parte integral de nuestra existencia por lo que debemos aprender a defendernos en finanzas si no deseamos atravesar situaciones económicamente complicadas que puedan ser negativas para nuestro futuro y para nuestra estabilidad emocional.

Por ello, es importante dedicar el tiempo necesario a adquirir una formación financiera de la mano de profesionales que nos ayuden a sacarle el máximo rendimiento a nuestro capital. Debemos destinar una parte de los ingresos del trabajo al ahorro, se gane mucho o se gane poco, adaptándolo al nivel de retribución y destinar una parte al ahorro. Como decía Warren Buffet: “No ahorres lo que te queda después de gastar… gasta lo que te queda después de ahorrar “.

Es por esto que, bajo mi punto de vista, es crucial la figura del consultor financiero independiente a nuestro lado, ya mencionado en varias ocasiones en este blog. El consultor diseña una hoja de ruta o mapa financiero, asesorando y elaborando un traje a medida a través de la planificación financiera, marcando los objetivos personales y profesionales así como las necesidades familiares y/o personales, y siempre teniendo como premisa tres conceptos que resultan fundamentales: Seguridad, Liquidez y Rentabilidad.

jill 111 © Creative Commons

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Por lo general, las familias no están acostumbradas a diversificar (regla básica) sino a tener un ahorro desordenado, esto es, tienen una hucha que podemos denominar como Cuenta Corriente, Depósitos…y es en ella donde se encuentran sus ingresos pero también sus gastos (los imprevistos, los gastos de los hijos, seguros, recibos, lo que quedará el día de mañana para la pensión, el posible cambio de coche, la hipoteca…). Se trata, por tanto, de un ahorro indiferenciado, desorganizado, del que van saliendo gastos y donde quedará un ahorro u otro que permitirá hacer algunas cosas y otras no. Sin embargo, si contáramos con una óptima planificación financiera, podríamos “orientar” nuestro ahorro a las necesidades que nos puedan surgir (avería de coche) o a los objetivos que nos vamos marcando (futuros estudios de nuestros hijos, viaje soñado). De este modo, el ahorro se convierte en el principal factor de riqueza de las familias.

En situaciones de inestabilidad económica (crisis china, la desaceleración global, la recesión en Brasil, el problema griego, etc.) el ahorrador de a pie no sabe muy bien cómo reaccionar, puede caer en la tentación del pánico y  del miedo y tomar decisiones sobre el “qué hacer” con los ahorros ante esta situación de inquietud e incertidumbre. No obstante, tales circunstancias pueden esquivarse si se dispone conocimientos básicos financieros y un profesional de confianza para saber diversificar, marcar un objetivo a cada inversión y tener disciplina de manera que no nos sintamos influenciados por los altibajos del mercado.

En definitiva, la formación financiera es la asignatura pendiente en nuestra sociedad, pero nunca es tarde para la adquirirla de la mano de un buen consultor financiero independiente.

¿Qué esperar después del verano?

Este final del verano ha sido bastante convulso… las caídas de las bolsas han descontado tres escenarios:

  • Colapso de la economía China (en vez de suave desaceleración), escenario que no compartimos:
  • Contagio a otras economías emergentes: Brasil y otros países asiáticos.
  • Fuerte contagio al resto de economías, incluidas las desarrolladas, escenario que no compartimos
Unsplash © Creative Commons

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Tras las intensas caídas sufridas en los últimos días, nosotros opinamos que:

1.- Los mercados han sobre reaccionado (ayudado por los bajos volúmenes de negociación del mes de agosto)

2.-   Las caídas de la bolsa no han discriminado, ni entre valores ni entre mercados

3.- Como siempre en situaciones de alta volatilidad, se han generado buenas oportunidades de inversión.

4.- Desde hace tiempo habíamos eliminado nuestra presencia de valores con exposición a la economía China y Brasileña.

Y si a esto añadimos que:

  1. No esperamos que vayamos a ver una recesión Global: Estados Unidos y Europa compensarán la bajada de crecimiento asiática y la recesión de ciertos países emergentes (Estos dos tercios de la economía global están basados en modelos de crecimiento generados por demanda interna)
  1. España está bien posicionada para participar de este crecimiento europeo:
    1. Datos Macros Fuertes
    2. Resultados de las compañías creciendo
    3. Tasas de descuento tras las caídas interesantes.
  2. Los tipos de interés van a seguir bajos durante los próximos meses (EEUU y Europa)

La conclusión sería que el mercado nos está ofreciendo una oportunidad de inversión para los próximos meses en Renta Variable europea y en especial en la española

No obstante entendemos que hasta que se celebren las elecciones generales en España, la volatilidad va a persistir en España. De este modo, una buena manera de estar invertidos en renta variable  es a través de Gesconsult León Valores (+5.24% YTD), ya que es un Fondo Mixto de Renta Variable Europea (30-75% en Renta Variable) en el que se hace una triple gestión:

1.- Se decide el porcentaje óptimo de inversión en Renta Variable/Renta Fija

2.-Se estudia que área geográfica en Europa es en la que hay que estar más o menos invertido.

3.- Y la selección de valores….

4.- Posibilidad de invertir hasta un 30% en otras divisas.

De este modo va a ser el Gestor el que decida en cada momento si aumentar la exposición en España o rebajarla teniendo en cuenta como se vayan desencadenando los distintos acontecimientos. A esto hay que añadir la baja volatilidad que tiene el fondo, a 10 años 10.11% frente al 24.41% del IBEX-35:

Fuente: Gesconsult

Fuente: Gesconsult

Ante las turbulencias: disciplina de inversión

Ha vuelto a ocurrir como es tradición en los mercados.  Una vez más el verano ha traído un fuerte movimiento en la cotización de los activos financiero. Esta vez la segunda economía del mundo ha desencadenado con su recorte de previsiones de crecimiento: los posibles problemas de su sistema bancario y crediticio; el desplome, prácticamente generalizado, de la cotización de las empresas que cotizan en sus bolsas y principalmente la devaluación de su divisa, el yuan, ha servido en bandeja las fuertes correcciones.

Zachary Young © Creative Commons

Zachary Young © Creative Commons

Son muchos los que se estarán preguntando en este momento y hablando con sus asesores, algo que animo a que haga, ¿qué está ocurriendo?.  Hasta donde puede llegar la corrección.  Pregunte e infórmese de cual es la situación y sobre todo analice como ha impactado estos movimientos en su cartera, pero ante todo no olvide una serie de cuestiones:

  • La predicción de cuál va a ser el comportamiento de los mercados financieros y el precio de sus activos, es impredecible. Recuerde que un mono y unos dardos acierta tantas veces o más en la selección de sus inversiones que los muy reputados analistas financieros
  • No olvide que cuando usted llevó a cabo la inversión, su planificador financiero las analizó y se las propuso para cumplir sus objetivos
  • Ese plan tiene un diseño basado en horizontes temporal, pregúntese si ha variado ese horizonte por los movimientos de mercado
  • El riesgo asumido en su momento se plasma en la diversificación de su cartera, además previsiblemente usted va a realizar nuevas aportaciones procedentes de su ahorro. Cuestiónese si es necesario modificar la exposición a los mercados rebajándola, tal y como le pide su corazón, cuando en su momento ya sabía que la incertidumbre siempre está presente en los mercados financieros
  • Testeé que su nivel de liquidez o dinero disponible en un muy corto plazo de tiempo, es suficiente como para afrontar un situación que aparentemente no estaba prevista
  • Mire si durante el periodo de tiempo más reciente, aproximadamente un año, ha llevado a cabo los reequilibrios y rebalanceos que todo plan de inversión demanda
Jordan McQueen © Creative Commons

Jordan McQueen © Creative Commons

En momentos como el actual el equilibrio entre la cabeza y el corazón es difícil, pero no olvide nunca que cuando usted tomó una decisión ayudado por su planificador financiero, eligió entre varias posibilidades un plan de inversión. El plan de la inversión tiene una disciplina.

No es fácil ganar al mono en el asesoramiento financiero, ahora bien la planificación ayuda a tener un plan de inversión que implementado seguro que le permitirá llegar a sus objetivos. 

Es ahora cuando se ve el tipo de planificador financiero que tiene y como está llevando a cabo su inversión, en el plan diseñado ya estaba implícito que los mercados financieros pueden ir mal, de ahí la disciplina para llevarlo a cabo.

La importancia del Consultor Financiero independiente

Bien es sabido que dos de las cosas que más nos importan son la salud y el dinero.

Para cuidar de nuestra salud, contamos con un médico de familia que se preocupa de analizar nuestro problema y darnos el diagnóstico más adecuado. Quizá, en ocasiones, no le damos la importancia que merece al hecho de disponer de un profesional de la salud en cualquier momento, puesto que es algo que la Administración Pública pone a nuestra disposición a través de nuestros impuestos.

Yulia Chinato © Creative Commons

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Para cuidar de nuestro dinero, sería conveniente contar con una persona de confianza, con la formación adecuada, que analice nuestra situación económica y nos asesore en la planificación de nuestro patrimonio de la forma que más nos convenga.

Pues bien, al igual que confiamos nuestra salud a médicos cualificados con una completa formación, deberíamos actuar del mismo modo a la hora de cuidar nuestro dinero; esto es, exigir que el asesor tenga una completa formación y esté cualificado para desarrollar su trabajo y velar por nuestros ahorros como si de nuestra salud se tratara.

Por lo general, depositamos nuestros ahorros en entidades bancarias sin tener la certeza de que la persona que está detrás del mostrador nos está ofreciendo productos acordes a nuestras necesidades e incluso podemos pensar que se preocupa únicamente de cumplir los objetivos laborales que le exige su entidad, “colocándonos” productos que en muchas ocasiones nos causan perjuicios importantes; solo habría que recordar algunos desgraciados episodios recientes como los ocurridos con preferentes, bonos convertibles, salidas a bolsa, etc.

Cuando nuestro médico de familia nos ha de recetar algún fármaco, tiene en cuenta si padecemos alguna alergia, si somos intolerantes a algún producto, si se trata de una mujer embarazada, etc.; es decir, nos prescribe un medicamento que no sea contraproducente para nuestra salud. En la misma línea, es importante que nuestro consultor financiero nos ofrezca los productos de ahorro e inversión que más se ajustan a nuestro perfil, a nuestras necesidades y a nuestros objetivos vitales.

Camila Cordeiro © Creative Commons

Camila Cordeiro © Creative Commons

Además, nuestro médico no está “atado” a ninguna casa farmacéutica: nos receta el fármaco que más nos conviene y que producirá el mejor efecto en nuestra salud, sea la marca que sea. Tiene a su disposición un mercado completo de productos de diferentes firmas, a los que puede acceder y de los que tiene conocimiento en cuanto a las consecuencias que puedan producir y las contraindicaciones que puedan conllevar. Del mismo modo, es interesante que quien cuide de nuestro dinero tenga alcance a toda la gama de los productos financieros que existan, sin tener que limitarse a los que ofrezca una u otra entidad bancaria y que, además, conozca el funcionamiento de dichos productos.

Por otro lado, nuestro médico, nos aconseja cómo sobrellevar mejor nuestra enfermedad o cómo evitar un resfriado, cuándo es la mejor época para vacunarse, etc. Igualmente, nuestro asesor financiero debe recomendarnos cuándo es más beneficioso comprar productos y cuál es el momento de vender para consolidar nuestro beneficio.

En definitiva, es muy conveniente la existencia de la figura del consultor financiero independiente que pueda cuidar de nuestro dinero al igual que lo hace el médico con nuestra salud. Es un profesional de primera necesidad, fundamental en nuestra vida mientras que consideremos que el dinero es una de las cosas que más nos importan.

El mundo desarrollado está en buena forma

Ha sido un mes de agosto duro y el comienzo de septiembre no está siendo mejor para todos los que nos dedicamos a esto de los mercados financieros. El miedo a un descalabro de la economía china ha provocado una corrección muy significativa de los activos de riesgo y ha hecho también que los tipos de interés a largo plazo en muchos países se hayan situado en niveles sólo compatibles con un período largo y penoso de bajo crecimiento y de potencial deflación global.

Todd Quackenbush © Creative Commons

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No es que nos guste llevar la contraria, pero desde Alinea creemos que no es precisamente ese el escenario al que nos enfrentamos. Las principales economías desarrolladas se encuentran en mucha mejor forma que en pasados ejercicios: el crecimiento en Estados Unidos está consolidado, con los salarios empezando a repuntar ligeramente y cerca del pleno empleo; Europa va a crecer y lo va a hacer con ganas gracias a la suma de shocks positivos (tipos bajos, petróleo barato, euro débil, políticas fiscales más expansivas, crédito…); Japón está dando síntomas de mejora de cara a los próximos trimestres. Sólo una (poco probable en nuestra opinión) desaceleración abrupta de la economía china, podría hacer peligrar el devenir económico de las principales economía ricas del planeta.

Pero si todo está tan bien, ¿Por qué hemos visto lo que hemos visto este verano?  La “culpa” hay que echársela a China o, más bien, a los miedos sobre China. Es cierto que el gigante asiático (que ya es la segunda economía mundial) se encuentra inmerso en un proceso de desaceleración estructural; es cierto que las autoridades locales han acumulado mucha deuda en los últimos años; es cierto que el sector inmobiliario está pasando por problemas; y es cierto también, por supuesto, que son varios los sectores industriales donde el exceso de capacidad productiva sigue siendo alarmante.

La pregunta clave es; ¿Son las razones anteriores suficientes para considerar como lo más probable una desaceleración abrupta de la economía china que no sólo afecte a los chinos sino que sea de tal magnitud como para descarrilar el devenir de unas economías desarrolladas que cuentan con los mejores fundamentos para crecer a corto plazo que se han visto en los últimos años?

designerpoint © Creative Commons

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Nosotros creemos que no. Con todos sus problemas, China está dando pasos en la transformación de su modelo productivo, con el consumo privado ganando peso de forma importante por el lado de la demanda, con el sector servicios haciendo lo propio por el lado de la oferta; y con los sectores industriales de mayor contenido tecnológico comenzando a tomar el relevo de los segmentos más tradicionales y más aquejados por el exceso de capacidad productiva.

¿Significa esto que China no tiene ningún problema y que va a seguir creciendo a tasas similares a las del pasado? No, por supuesto que no. Pero sí invita a pensar que el escenario más probable para este país no es el de colapso sino más bien el de una desaceleración progresiva, como de hecho les ha sucedido a todos los países a medida que han ido avanzando en su desarrollo económico.

Por lo demás, conviene no olvidar que las autoridades chinas son probablemente las que más capacidad tienen en todo el mundo para llevar a cabo políticas monetarias y fiscales contra cíclicas, como de hecho están haciendo. En efecto, a diferencia de lo que ocurre en buena parte del mundo desarrollado, las autoridades monetarias pueden todavía bajar los tipos de interés, porque se encuentran relativamente lejos del 0%. Además, y pese a que la deuda del país no es baja en términos brutos, lo cierto es que China es el acreedor neto del resto del mundo, lo cual significa que tiene muchas reservas que gastar antes de tocar retirada.

Commodities, ¿riesgo u oportunidad para la economía global?

Desde que las materias primas tocaran máximos en 2010, prácticamente todas desde entonces tienen una tendencia bajista que este año se ha acentuado aún más. Por ejemplo, el oro, desde que tocó unos máximos de casi 2000$ la onza, ha llegado a bajar casi un 50% perdiendo en estos momentos un 43% desde entonces. Y todos tenemos en mente, porque nos toca más de cerca el bolsillo, el rally que tuvo el año pasado el petróleo que lo llevó a 50$ desde 100$ o más recientemente desde los 70$ a 40$, con su impacto en el precio de la gasolina.

Skeeze © Creative Commons

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Ahora bien, ¿qué impacto tienen estas bajadas en la economía real? Pues bien, como dice el refranero español, nunca llueve a gusto de todos, ya que estos movimientos dejan grandes beneficiados y perjudicados por el camino.

Entre los grandes beneficiados destaca uno, Europa. Este continente es en general, el que más depende de las importaciones de materias primas, ya que aunque hay producción de petróleo, metales y otras materias primas que cotizan, solamente Noruega (y en menor medida el Reino Unido) tienen unas producciones de petróleo importantes, el resto de Europa es importador neto, por lo que bajada del precio de este ahorra miles de millones al año a estos países (aunque claro, también afecta negativamente a sus principales empresas productoras de petróleo, que son de las principales del mundo). En este caso he ejemplificado el petróleo, pero este año, quitando el cacao, el algodón y el aceite de colza, todas las materias primas están bajando, desde el cobre hasta el trigo.

Luis Llerena © Creative Commons

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Sin embargo, en las economías emergentes, que son principalmente exportadoras de materias primas, estas caídas de los precios están lastrando sus crecimientos (con desigual intensidad en función de la estructura de las exportaciones de cada país). Por ejemplo, Brasil, cuyas exportaciones tienen un peso muy notable en su economía se está viendo notablemente afectado (-1.6% PIB en la última revisión) por la caída del petróleo, la soja (dentro de los  cinco principales productores mundiales), café, metales, etc. En general, casi todas las economías de Latinoamérica, les está afectando notablemente este hecho.  Por otro lado, no todas las economías emergentes se ven afectadas, sin ir más lejos, las economías del sudeste asiático no son casi ninguna exportadoras netas de petróleo, por lo que les ayuda a su crecimiento, y en especial a India, una economía muy dependiente del petróleo en el que una bajada del precio del barril en 10$ puede llegar a sumar un 1% a su crecimiento.

Como conclusión, estas bajadas de los precios van a generar una presión deflacionista a las economías que provocará que aumente la renta disponible de las empresas y familias aumentando el consumo, lo que a largo plazo volverá a aumentar los precios reequilibrando los ingresos y crecimiento global, por lo que aunque a corto plazo sea negativo para determinadas economías, para el crecimiento global a largo plazo es una oportunidad.

¿Qué va a suceder en la segunda mitad de año?

El primer semestre del año ha terminado por ser bastante más volátil de lo que el mercado auguraba en un principio. Durante los cuatro primeros meses vimos una espectacular subida, que presagiaba un año de grandes ganancias; sin embargo, el riesgo de salida de Grecia del euro echó por tierra la rentabilidad de muchos mercados y arrojó incertidumbre sobre la moneda única europea.

xuanzi86410527 © Creative Commons

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El segundo semestre tampoco viene corto de importantes citas, que pueden provocar que los mercados (sobre todo en España) se tambaleen de nuevo; por consiguiente, debemos, para no sufrir pérdidas, preparar nuestras carteras de fondos.

Antes de septiembre

El primero de los frentes abiertos (el pago, antes del 20 de agosto, de la deuda de 3500 millones de euros que Grecia tiene con el BCE) parece que se ha solventado sin mucho ruido, y el mercado no ha sufrido ningún contratiempo.

El país heleno se prepara para unas nuevas elecciones, que volverán a tener a Grecia y al euro en las portadas de los periódicos salmón;  sin embargo, creo que el mercado no va a sufrir tanto como lo hizo en el pasado semestre.

Septiembre

China

Aunque los problemas de las caídas en el índice de la Bolsa de Shanghái empezaron a mediados de julio, tiene pinta de que las volatilidades de este mercado y sus consecuencias para el resto de las bolsas del mundo han llegado para quedarse, por lo menos, hasta final de año.

Tras las sucesivas  devaluaciones del yuan por el Gobierno de Pekín, no parece que haya terminado el culebrón de las caídas y la recuperación de la bolsa, que nos ha tenido en vilo gran parte del verano. Sin embargo, la devaluación del yuan abre un nuevo abanico de incertidumbres y problemas para las empresas europeas y españolas que tienen importantes inversiones en el país asiático.

La Bolsa china ha tenido una revalorización  superior al 100 % desde octubre de 2014 hasta el mes de julio de 2015; por tanto, aunque sus pérdidas han llegado a ser superiores al 40 %, cualquier inversor avezado que tuviera fondos que invirtieran en estos mercados ha conseguido —aun con la caída— una interesante rentabilidad. A pesar de ello, creo que una de las mejores opciones  es buscar fondos con estrategias globales de países desarrollados (renta variable europea o americana) y dejar, por el momento, las inversiones en países emergentes, hasta que se aclare el panorama o amaine la volatilidad en estos mercados.

 

Elecciones en Cataluña

La primera cita que tenemos en España son las elecciones catalanas, a finales del mes de septiembre, en las que parece que habrá una importante apuesta por parte de los partidos independentistas. Si esta postura política saliera adelante en estos comicios, podría sembrar una gran incertidumbre en la Bolsa española, hasta que se aclarara la situación; una de las consecuencias podría ser —dependiendo de las políticas económicas de los nuevos dirigentes— que cambiaran los domicilios sociales de algunas empresas situadas en territorio catalán; esto ya ocurrió hace unos años, cuando el movimiento independiente catalán intentó la secesión de España.

JoaquinAranoa © Creative Commons

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Frente a este panorama, lo más propicio sería buscar fondos de inversión de renta variable española —mercado que, pese a las incertidumbres que estamos viviendo, tiene muy buenos datos en los fundamentales de las empresas cotizadas—;  tampoco sería mala idea buscar fondos que no tengan empresas situadas en Cataluña. Entre la amplísima gama de fondos de renta variable nacional, elegiría los siguientes: EDM Inversiones y Gesconsult Renta Variable.

Elecciones españolas

Este es otro de los puntos significativos antes de final de año. Aunque a día de hoy todavía no se conoce la fecha, la mayoría de los expertos opina que tendrán lugar, como muy tarde, el 20 de diciembre. Una de las cuestiones relevantes es el número de escaños que obtendrán los nuevos partidos políticos, y si estos serán imprescindibles para gobernar.

Según los distintos escenarios que he analizado mientras preparaba el post, creo que solo si Podemos o Ciudadanos fueran necesarios para formar el Gobierno, podríamos tener una alta volatilidad, debido a la incertidumbre que se crearía. Esta situación afectaría al mercado de renta fija, además de provocar subidas del bono español y de la prima de riesgo, y caídas en el IBEX. Lo mejor en este contexto sería buscar fondos de renta variable europea, pero, para reducir el riesgo, aquellos que tuvieran posiciones en Italia, Francia o Alemania, y no en el mercado español. De ellos, yo elegiría el fondo de DWS Aktien Strategie Deutschland (muy centrado en empresas alemanas), o bien un fondo menos volátil, como el Invesco Pan European High Income C Acc (posicionado en empresas británicas, francesas y, también, alemanas).

Por otro lado, en el supuesto de que los dos grandes partidos continuaran siendo las fuerzas mayoritarias (o bien que uno de los dos consiguiera la mayoría absoluta, posibilidad que considero menos probable), seguramente habría un descenso de la volatilidad y una subida de la Bolsa española, debido a los buenos resultados empresariales, a los tipos de interés bajos y a la reducción paulatina del paro.

La subida de tipos de interés americanos, y el Obamacare

Este es otro de los puntos candentes del segundo semestre de 2015, cuando se espera que la Fed suba tipos. Las apuestas sobre si lo hará en septiembre o en diciembre están al 50 %, aunque empiezan a decantarse por finales de año; yo creo que ocurrirá en diciembre o en  2016.

Los datos macro americanos reflejan una consolidación de ese mercado y una fuerte salida de la recesión económica. Mi opinión es que la Fed subirá tipos de manera uniforme, por lo que buscaría fondos de renta fija americana que pudieran beneficiarse de esta subida paulatina de tipos. Uno de los que mejor lo está haciendo es el fondo de la gestora Amundi (Amundi Funds Cash USD FU-C Class), que está aprovechando la revalorización del dólar frente al euro.

Otro sector interesante es el sanitario americano (debido al famoso Obamacare, una pretensión del presidente de que todos los americanos tengan acceso a la sanidad).  La nueva ley sanitaria podría relanzar las empresas del sector, sobre todo farmacéuticas y aseguradoras; ambas están viviendo importantes operaciones de fusión desde que salió la noticia. Entre los fondos que mejor se están comportando ante esta información destacan los siguientes: Candriam Equities L Biotechnology N Acc USD y JPMorgan Funds – Global Healthcare D (acc)  USD.

Conclusión

La segunda parte del año viene repleta de noticias que provocarán que la volatilidad sea una de las protagonistas del mercado, circunstancia que no ayuda a la hora de tomar decisiones sobre cómo manejar el dinero de los pequeños inversores.

Ante esta situación, es fundamental tener claro cuál es el horizonte temporal de las inversiones que se realizan, además de conocer la aversión al riesgo de cada inversor, y las necesidades de capital a corto, medio y largo plazo. Siempre es bueno, además, contar con un profesional que ayude a planificar financieramente la inversión, para que resulte lo más beneficiosa posible.